jueves, julio 12, 2007

La vía del conocimiento.


He terminado/comenzado un proyecto, una idea que había rondado mi mente desde hacía varios años y que hoy vio su nacimiento de una manera que nunca creí que se desarrollaría.

Recuerdo mi primer acercamiento ante el tarot. Tenía unos 16 años y estaba lleno de ideales extraños, odios reprimidos y culpas sin sentido que en ese tiempo me preocupaban poco, pero que manejaban mi vida de una manera asombrosa, tanto como el cambio de personalidad que he sufrido desde ese tiempo hasta ahora.

Estaba una señora sentada en mi comedor, ofreciendo leerme las cartas. Acepté e hice preguntas absurdas ya que mi objetivo no era saber mi situación actual sino simplemente conocer sucesos extraordinarios que debían pasarme para auto explicarme el como era yo, porque claro como estaba destinado a una situación absolutamente anormal y superior, debía ser un ente increíble y lleno de casualidades que provocarían el que yo fuera así. Obviamente era un tipo absolutamente normal, que mientras se pudiera proponer algo lo conseguiría. Al final eso fue lo único que saqué de esa tirada.

Posteriormente esta señora me recomendó asistir a unas reuniones un tanto extrañas con el objetivo de “cultivarme” en estas cosas. Yo en ese tiempo –un ser bastante escéptico y racional- asistí para ver como eran estas reuniones y no me cautivé en lo absoluto en ese momento, alejándome de lo “mágico” y volviendo a una vida común y silvestre en donde las cosas sólo se pueden explicar con el plano material y mental, siendo lo demás supersticiones burdas y sin sentido.

Así se desarrolló mi vida hasta unos años atrás, en donde me volvió a picar el bicho de la magia y de lo místico. Inspeccionar un poco sobre Jung y luego recibir algunos textos por parte de un amigo abrió mi apetito por las “ciencias ocultas”, y desde allí el estudio se intensificó leyendo algunos libros en busca de conocimiento “arcano” para poder entender una parte del mundo que no puede ser explicada por este plano material.

Porque en magia y sucesos paranormales he creído desde hace poco. Y no es una creencia ciega, sino una creencia que va desde el punto de vista de la experiencia, la que te dice que si un suceso se presenta en el mundo no tiene porque ser una simple apariencia carente de verdad. Es difícil creer que mucha gente, a lo largo de la historia ha tenido una alucinación mental cuando presencia estos fenómenos y por ende es un área digna de estudio, el cual permite comprender ciertas cosas que no son ajenas a uno pero que pasan en este mundo.

Así terminé aprendiendo algo de cábala y por añadidura de tarot. Me dijeron que no podía comprarme un mazo sino que tenían que regalármelo. Pensé que eso no tenía porque ser así, dirigiéndome al lugar en donde sabía que los vendían. La tienda había desaparecido misteriosamente de mi mapa mental. Volví al día siguiente y estaba cerrada. Pensé, ¿mucha sincronicidad no? desistiendo de la compra respectiva.

Pasaron cerca de 8 meses cuando un compañero de la u me ofreció enseñarme. Yo acepté gustoso, ya que el tarot es parte complementaria de la cábala, materia que había dejado de estudiar debido a los estudios prioritarios que curso (derecho respectivamente), pero ese ofrecimiento me re-abrió las posibilidades, sólo que tenía un pequeño inconveniente... no tenía tarot y nadie que me lo regalara.

Así que decidí por una vía alternativa y mucho más enriquecedora. Empecé a dibujar mi tarot, que naciera de mi y que los dibujos fueran reflejo de la interpretación que a cada carta le daba.

Hoy terminé ello, y siento que fue lo mejor. Haber fabricado mi propio tarot antes de obtenerlo por otros medios ha sido un buen camino de enriquecimiento y comprensión espiritual. Un occidental no necesita dejarse ir hacia las cosas que están en el cielo, sino ir a por ellas y traerlas hasta acá, hasta el mundo terrenal “venga a nosotros tu reino” reza una de las más famosas oraciones del mundo occidental. Dejarse ir sería demasiado pasivo, muy poco occidental.


Me advirtieron que tuviera cuidado, que podía atraer entidades del bajo astral debido a esto, pero el cuidado siempre ha estado, la protección de los dioses siempre está conmigo, ya que mientras no actué mal, nada malo me será devuelto, nada.

1 comentario:

MML dijo...

Maestro, vi tu comentario en uno de los posts de mi blog hoy, y no se cuándo fue que lo escribiste. La cosa es que hoy recién lo vi y se agradece.
La vía del Tator es un camino muy lindo para crecer uno y ayudar a los demás a crecer también. A mí me ha servido de guía en muchos aspectos y me ha servido como herramienta no sólo de diagnóstico, sino además y por sobre todo terapéutica en varios casos.
Hay quienes dicen que hacerse su propio mazo no es bueno, pero la verdad yo, en lo personal, no le veo nada de malo. Mientras las cartas te evoquen eso que sólo los Arcanos mayores y menores pueden evocar, mientras las cartas hablen y te sugieran, todo va por buen camino.

Un saludo,

Matías