Francis Grandhole se perdió en Los Andes. Viajaba a Buenos Aires para hacer una conferencia sobre su tercera edición del Best Seller “Soluciones para el pensamiento”. Sin embargo el avión capotó en la montaña y obligó a Francis a 8 años de vida ascética. Logró sobrevivir con agua, algunas hierbas y animalitos pequeños que encontró en el lugar. Luego, perdida toda esperanza se transformó en un mendigo que vivía en una ermita y comía los residuos que le daban algunos camioneros. Un noticiero al ver que carecía de noticias relevantes realizó una nota sobre Francis, ya descubierto, quién se había negado a vivir nuevamente en la sociedad. Dentro de esa entrevista éste señaló que sus libros debían ser quemados y que eran peligrosos para la población. Llamaba a todos a viajar al campo, cultivar sus propias hortalizas y dejar de pagar los impuestos.
Lamentablemente lo dieron por loco. Extrañamente cuando escribió su libro pensaron que era la persona más cuerda que había.
